jueves, 6 de agosto de 2009

Cinco minutos

Estos cinco minutos me los cojo contigo, contigo María José, con una compañera de trabajo que se merece sonreír. Desde que te conozco, desde que te fuiste de viaje de novios, desde que te vi llorar y las cosas en el trabajo no iban bien. Me cojo estos cinco minutos, hoy más que nunca. Tu papa se ha ido y te repito, no soy tu amigo y aunque sea mas blando que una magdalena mojada en leche, te aprecio más allá de la labor que desempeñamos. Un abrazo y energía, mucha energía, ¿Cómo no me iba yo a coger estos cinco minutos contigo?
Me enfundo mis chanclas y sin mucho mas protocolo, me marcho del triste tanatorio, dejando atrás energías útiles, a la hora de levantar al camarada caído.
Animo.

No hay comentarios: