Hoy me he sentado a mirarte

Hoy me he sentado a mirarte, tengo tiempo, me gusta el chocolate de tus besos y el viento no me importa mi cometa es la mejor de tu cielo y mis palabras solo quieren ser aliadas de tu pelo. Abro la ventana y entra el sol, afuera la ciudad con su ruidoso calor, liberas a la selva de tus ojos, tu sueñas a mi lado y yo me muero en un bostezo, y la realidad me queda tan lejos. No se vibrar si tu pasión se me apaga, si bebes de ese zumo la alegría no se acaba. Pude consolarme con oírte, hoy no vivo si no te espío al vestirte y si no ríes mis chistes…pues…sigo al tambor, tu caminar hasta la ducha y pienso en el premio de tenerte, mi dicha. Ser tan distinta, ser natural como un silencio, mi pintura, mi idea, mi facultad y mi lienzo.

Hoy me he sentado a mirarte y eres tú…

Mi alegría, mi apoyo, mi camino y mi luz.

Voy a bailar esta mañana para siempre…

Voy a bailar esta mañana para siempre.

Que llueva, que llueva, que lluevan besos de miel,

O mermelada de la dulce y rica hecha en tu piel.

Vamos a bailar agarrados, los días son largos y geniales los veranos a tu lado. Vivo en la crisis de 7 horas sin ti, me arrodillo ante el altar de no parar de sonreír. Amo vivir a tu lado, amo a mi musa, odio la mentira de la gente y me asusta. Somos verdad y levedad en los días de querer y poder, de jugar en nuestra inopia…y si descanso en el oasis mental de parar a repostar las ilusiones y soñar…

Sigo tu paseo matutino descalzo, que acaba refugiado al pernoctar en tus brazos. Hago que tener o que me quiten no importe. Hago que tu voz sea la brújula al norte. Loco porque vivo con el agua hasta el cuello del manantial que va a parar al mar que riega nuestro tiempo.

Hoy me he sentado a mirarte y eres tú…

Mi alegría, mi apoyo, mi camino y mi luz.

Voy a bailar esta mañana para siempre…

Voy a bailar esta mañana para siempre.

Que llueva, que llueva, que lluevan besos de miel,

O mermelada de la dulce y rica hecha en tu piel.

Hoy me he sentado a mirarte, no tengo ganas de que llegue la noche y disfrutarte en la mañana. Ser el desayuno que alimenta tus besos con menta y tu deseo con posturas que inventa. La gravedad ya no se siente en el espacio, si te caes en nuestra cama y todo pasa despacio. Hoy me he sentado a mirarte, soy feliz, porque el tren de lo aburrido no pasó por aquí.

Podría levitar y evitar lo mundano, pero siento más que Reiki cuando rozo tus manos. Vistes tu cuerpo pero desnudas tu alma, me quema tu fuego pero me enfría tu calma. Hoy me he sentado a mirarte tengo suerte, aprendo a esperar y espero solo para verte. Debo rezar para no perderte nunca, puedo pecar en cualquier sitio y que surga.

Que brote el amor y que mi pena se vaya, no existe un desayuno mejor que tus palabras.

Hoy me he sentado a mirarte y eres tu, mi alegría, mi apoyo, mi camino y mi luz.