Esta Naturaleza

Y en un suspiro te coloco en otra luna,
Ojos de habitante de ciudad, pero en concreto de ninguna.
El más veloz transporte enfoca nuestras calles,
Luces y colores nos ponen el sentimiento al viaje.
Donde el arte no muere y donde, una vez mas,
La familia cementa nuestra adaptación al medio,
Que a veces ni nos necesita, ni nos quiere.
La luna cae sobre Madrid y el sol,
Sale en Torrejón.
Hora de despertar! Algunos drama, algunos pasión.
¿Donde llegaran los limites de la gente que pisa aquí?
Llegaran donde nuestra naturaleza diga basta,
Donde ponga ''FIN''
Existe otra parte,
Una parte donde convive igual cultura, musicas, gente, arte...
Encarnados en papel de política muchos triunfan
Y se exhiben,
Arriba todo se ve distinto, abajo no se ve, se vive.
Mientras tanto, acciones colaterales inyectan ruido...
Del cual no nos podemos deshacer y a veces,
Huimos...
Y vuelta la borrica a los tomates, volvemos.
Esta naturaleza nos atrapa, la vivimos y la morimos.
Transformamos creencias, mitos y fe,
Abandonando el pasado.
Tenemos mucho que aprender.
Aunque parezca que lo tenemos todo aprendido.
Y así tras un visillo roto y una mirada desgarrada,
El fondo nos muestra nuestra naturaleza.
No basta con estar, a veces hay que observar
Y detenerse también en ella.
Aquí las pinturas rupestres aparecieron,
Porque aquí se asentaron, respetaron y vivieron.
Después...lo demás.
Crianza de valores típicos y el espacio con derecho a la tranquilidad.
Pintamos esperanza con letras grandes en un muro.
Porque hay luz de donde venimos,
Hay luz a donde vamos,
Pero el camino es oscuro.